Cómo sacar espigas a un perro

Cómo sacar espigas a un perro

Cómo sacar espigas a un perro y prevenir lesiones graves

Si necesitas saber cómo sacar espigas a un perro, es fundamental que conozcas ciertos aspectos para evitar que un momento tan placentero como el paseo se convierta en una situación de riesgo para tu mascota.

¿Qué son las espigas y dónde se encuentran?

Las espigas son semillas secas con forma de lanza que se desprenden de gramíneas y otras plantas silvestres. Su diseño natural les permite adherirse fácilmente a cualquier superficie, especialmente al pelaje de los animales. Se encuentran con frecuencia en campos, zonas rurales, solares abandonados e incluso en parques urbanos o jardines mal cuidados.

¿Por qué son peligrosas para los perros?

A pesar de su pequeño tamaño, las espigas pueden causar daños considerables. Una vez que se enredan en el pelaje del perro, pueden avanzar por su cuerpo y penetrar en la piel, los oídos, ojos, nariz, entre los dedos de las patas e incluso en zonas más delicadas como la zona genital. Debido a su forma en punta y con pequeñas púas retráctiles, las espigas solo avanzan hacia adelante, lo que puede provocar:

  • Infecciones graves.

  • Abscesos y fístulas.

  • Otitis externas e internas.

  • Conjuntivitis o úlceras corneales.

  • Dificultades respiratorias si llegan a las vías nasales.

¿Cómo sacar espigas a un perro?

1. Espigas superficiales:
Si detectas una espiga reciente en el pelaje o sobre la piel, puedes retirarla cuidadosamente con los dedos o con unas pinzas. Es importante hacerlo con suavidad para evitar que se rompa y quede un fragmento dentro. Revisa bien la zona para asegurarte de que no hay más.

2. Espigas incrustadas:
Si la espiga ya ha penetrado la piel o notas inflamación, cojera, rascado persistente o secreciones, acude inmediatamente al veterinario. Intentar extraerla por tu cuenta puede empeorar la situación, ya que la espiga puede romperse, migrar internamente o causar infecciones más profundas. El veterinario podrá localizarla mediante exploración física o con técnicas como ecografía o endoscopia, según el caso.

¿Cómo prevenir las espigas?

La prevención es clave, sobre todo en primavera y verano, cuando las espigas están más presentes. Aquí van algunos consejos prácticos:

  • Cepilla a tu perro después de cada paseo, especialmente si tiene el pelo largo o denso.

  • Evita pasear por zonas con hierba alta o arbustos sin mantenimiento.

  • Revisa bien zonas críticas como entre los dedos, orejas, ojos, axilas e ingles.

  • Mantén el jardín limpio si vives en una casa con terreno. Corta el césped con frecuencia y elimina hierbas silvestres.

  • En perros de pelo largo, considera cortes de mantenimiento en épocas de riesgo.

  • Existen productos como botines protectores o espráis repelentes de espigas, que puedes usar en zonas propensas.


Ya sabes cómo actuar frente a las espigas y cómo evitar que afecten a tu perro. Recuerda: la vigilancia diaria y una buena higiene son tus mejores aliados. Si quieres seguir aprendiendo sobre salud y bienestar canino, explora nuestros artículos especializados y mantén a tu peludo feliz y seguro todo el año.

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